¿A qué viene esto ahora?

Cuando Mariano Rajoy ofreció colaboración al presidente del Gobierno con vistas al proceso de paz con ETA, ¿a qué se refería? ¿Qué entienden en el Partipo Popular por colaboración? Una de dos, o no entienden el concepto, o no son capaces de ponerlo en práctica porque aborrecen todo lo que huela a consenso. La colaboración, señores de la derecha, es no poner obstáculos al compañero de viaje para conseguir unos logros que beneficiarán a todos los españoles. Así, por ejemplo, no resulta de recibo sembrar la duda sobre las intenciones del Gobierno en lo referente a Navarra (por cierto, ni Zapatero ni ETA tienen la facultad de decidir si Navarra se funde con el País Vasco, son los navarros quienes tienen esa capacidad, que para algo está la Constitución: vean la Disposición Transitoria Cuarta del Título X y dejen la estrategia del miedo). Tampoco tiene mucho sentido (si es que quieren colaborar en serio) que comiencen una estrategia de acoso y derribo al nuevo ministro de Interior, que será quien tendrá que pilotar el proceso de paz, antes incluso de ver como se desarrolla su actividad en la cartera. No es ético tender la mano por un lado, y poner la zancadilla por otro en un momento de descuido. La reacción a las cartas de extorsión enviadas por ETA a empresarios vascos también es una buena muestra de que el PP no quiere colaborar, además de demostrar su falta de ética. Y es que hiere a la moral que a la primera de cambio, cuando surge el primer obstáculo para la paz, el PP salga dispuesto a rentabilizar electoralmente un hecho que, de ser cierto, podría hacer fracasar todo el proceso. Señores, ¿a qué viene esto ahora? No nos defrauden de nuevo. Las malas artes en política me indignan, sobre todo con la gravedad de lo que hay en juego.